Es un método sencillo, rápido y confiable. Es una tira reactiva inmunocromatográfica cualitativa, con alta sensibilidad y especificidad para detectar rotavirus del grupo A o sus antígenos, en muestras de heces fecales. Ofrece un resultado en solo 10 a 15 minutos.
• Estuche que contiene 24 tiras reactivas, envasadas individualmente en bolsas de aluminio junto a una bolsita desecante y un frasco con 25 mL de solución de extracción. Cada estuche contiene 25 aplicadores de algodón para la toma y dilución de las muestras de heces fecales, y las instrucciones para el uso.
• Estuche que contiene 50 tiras reactivas, envasadas en 10 bolsas de aluminio, que contienen cada una, 5 tiras reactivas y una bolsita desecante. Cada estuche contiene 2 frascos con 25 mL de solución de extracción cada uno; una bolsa de nailon con zíper para almacenar las tiras no utilizadas inmediatamente después de abierta la bolsa de aluminio; 50 aplicadores de algodón para la toma y dilución de las muestras de heces fecales, y las instrucciones para el uso.
Materiales adicionales requeridos
- Tubos de reacción de 1,5 mL: un tubo para cada prueba
- Gradilla para tubos de reacción
- Pipeta para dispensar 1 mL
- Guantes
Los reactivos y componentes de la prueba HeberFast Line® Rotavirus son estables hasta la fecha de vencimiento impresa en la etiqueta, si se mantienen a una temperatura de 2 a 8 °C. No congelar.
La solución de extracción es estable hasta la fecha de vencimiento original, una vez abierto el frasco que la contiene, si se mantiene a una temperatura de 2 a 8 °C en su recipiente original bien cerrado.
Las tiras no utilizadas inmediatamente después de abrir la bolsa de aluminio sellada, deben ser almacenadas de 2 a 8 °C en la bolsa de nailon con zíper suministrada, junto a la bolsita desecante, por un tiempo máximo de 7 días. Pasado este tiempo, se deben desechar las tiras no utilizadas.
HeberFast Line® Rotavirus se recomienda para la detección de rotavirus del grupo A o sus antígenos, en muestras de heces fecales.
La prueba HeberFast Line® Rotavirus está basada en el uso de dos anticuerpos monoclonales específicos contra la proteína VP6, que es mayoritaria de la cápsida de los rotavirus del grupo A. La VP6 es el antígeno más utilizado en los inmunoensayos comercialmente disponibles.
Al introducir el extremo de la tira reactiva en la muestra de heces fecales diluida con la solución de extracción, esta dilución comienza a desplazarse por la ventana de resultados. Los antígenos virales reaccionan con el anticuerpo monoclonal marcado con oro coloidal, y se forma un complejo antígeno-anticuerpo. Este inmunocomplejo migra por capilaridad hacia la ventana de resultados de la tira reactiva, y reacciona con un segundo anticuerpo monoclonal anti-VP6 fijado a la membrana de nitrocelulosa, y se forma una primera línea horizontal coloreada (línea positiva).
En ausencia de antígenos virales en la muestra, esta línea positiva no se forma.
El exceso de conjugado no atrapado en la línea positiva, continúa moviéndose y es capturado en la fase sólida en que se forma una segunda línea horizontal coloreada (línea control). Esta línea control se forma con todas las muestras, independientemente de que tengan rotavirus o no, como demostración de que los reactivos han funcionado correctamente.